lunes, 13 de agosto de 2012

La clemenules de Nules



Originaria de Nules, proviene del S. XIX. llamada también CLEMENTINA DE NULES, NULESINA O NULERA. En otros tiempos también llamada “clementina grossa” (gorda), debido a su buen tamaño.

Se originó por mutación espontánea de un árbol de clementina fina en un huerto situado junto al Calvario de la localidad en 1953. Debido al afán de mejora de la calidad gustativa y comercial de la fruta, que siempre ha distinguido al agricultor de Nules. Se inició su multiplicación de manera paulatina, con objeto de comprobar sus características y posible interés.

Visto que se adaptaba y producía bien, y respondía a lo que se esperaba de ella, se inició la expansión en mayor escala a toda la zona citrícola, llegando actualmente a ocupar un lugar destacado.

Esta clementina ha llevado el nombre de Nules a diferentes países del mundo, dejando constancia del fruto de su tierra y de sus hombres.

Los vecinos de la Ciudad, representados en el Ayuntamiento han sabido apreciar y reconocer la gran importancia de la Clemenules, a la que se dedica una plaza con su nombre, en la cual está ubicado un monumento con una fundición réplica del naranjo que produjo por vez primera dicha variedad. Además, bianualmente se celebra en Nules el Congreso de citricultura y la FIESTA DE LA CLEMENULES, entre los meses de marzo y abril.

La Clemenules es considerada, por la gran mayoría, la mandarina 'reina' por excelencia. Su sabor es dulce y agradable y su extensa producción la convierten en la mandarina más cultivada y difundida.

Al igual que la Clementina Fina, el árbol de la Clemenules es vigoroso, de gran tamaño y muy productivo. El crecimiento es abierto, follaje denso y achatado.

El fruto es de tamaño medio, corteza lisa y fina y color naranja pálido. Su pelado es fácil y posee una gran cantidad de zumo, así como un alto contenido vitamínico y de muy buen aroma. La pulpa es de gran calidad y fundente.

Excelente niveles ácidos/azúcares y a medida que va avanzando su madurez en el árbol y recolección, la acidez desciende.

Clementina de forma redondeada con ramas inclinadas, hojas grandes y de color verde claro. El fruto es de tamaño grande, entre 80-100 gramos. Forma un tanto achatada y con corteza de color naranja intenso. La pulpa jugosa y de una calidad muy buena. Prácticamente sin semillas.

Tiene fácil pelado, sin semillas y con un sabor muy agradable. La proporción entre los ácidos y los azúcares es muy equilibrada, además su pulpa es fundente con lo cual no deja residuos al comerla

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